Cobertura fotográfica por Agostina Reula
La
tranquilidad de la mañana de este jueves se vio alterada desde temprano por una
manifestación poco convencional. Acompañados por cantos, bailes y diversas
expresiones artísticas, un numeroso grupo de vecinos autoconvocados marcharon
hacia el palacio municipal imponiendo como estandarte los lemas “La Cultura es
un Derecho” y “Hoy se despierta la cultura en Paraná”. El color rojo y los
cánticos de gallo marcaron el distintivo de la marcha Despierta Cultura.
La
Asamblea por el Derecho a la Cultura en Paraná comenzó a gestarse los primeros
días de enero, y con el paso de las semanas
fue creciendo cada vez más, reuniendo no solo a los artistas locales
sino también productores, trabajadores de la industria y vecinos en general. El
colectivo se moviliza en repudio al vaciamiento que la cultura local ha sufrido
en el último tiempo y por la falta de políticas públicas culturales que el
Estado debe garantizar. Además se exigió la renuncia de Magda Varisco, quien se
encuentra a cargo de la Secretaría de la Cultura Municipal en esta gestión, por
considerarla ineficiente para el puesto que ocupa.
La
protesta recorrió varias cuadras del centro paranaense. La concentración fue en
plaza Alvear, desde donde partió el tumulto a las 9:30 hs. El circuito se
movilizó por la peatonal San Martín hasta su intersección con calle Urquiza,
para luego dirigirse por dicha arteria hasta la esquina donde se ubica la
municipalidad. A lo largo del recorrido, se realizaron distintas intervenciones
artísticas que atrajeron el interés de quienes circulaban por la zona.
Con
distintivos en color rojo, los miembros de la Asamblea repartieron volantes
informativos mientras que otros recolectaban firmas para adherir a los
documentos elaborados por la agrupación.
Varias
fueron las paradas propuestas por el colectivo, donde se pudieron apreciar
funciones de teatro, circo, artes plásticas y literatura. Personas de todas las
edades participaron de esta particular movilización. Los originales cánticos,
con tonos pegadizos, hicieron que más de uno sumaran su voz y sus aplausos. Y
en el medio de todos… un perrito callejero que caminó a la par de los
presentes.
Al llegar
a la puerta de la municipalidad, se pusieron en marcha las últimas
intervenciones. Un espectáculo circence y una danza con telas. Luego, en medio
de una gran ronda, un grupo de personas enmascaradas con la cara de la
secretaria cultural, cargando a un bebé con la cara del intendente de la
ciudad, entonaron un cántico dirigido exclusivamente a estos miembros de la
familia Varisco y a su fallida gestión en cuestiones de cultura. Para finalizar
la procesión, un representantes de un grupo literario compartieron poesías
propias en relación a la problemática, y se concluyó con la lectura de un
documento elaborado por la Asamblea donde se enumeran los motivos que llevaron
a la conformación de la misma.
Tras el
cierre, los presentes se fueron dispersando mientras que un ínfimo grupo de
personas se trasladó a la nueva explanada de Plaza de Mayo para disfrutar un
rato más del baile y la música.
La Asamblea por el Derecho a la Cultura volverá a reunirse el próximo lunes 13 de febrero a partir de las 19 hs. en la
plaza Alberdi – más conocida por ser la plaza del bombero – para seguir
debatiendo los pasos a seguir en la lucha a favor del derecho a la cultura.
La lucha
de la Asamblea
En la Marcha Despierta Cultura se procedió a la lectura del documento elaborado
por el grupo de autoconvocados En dicho texto se expresan los motivos que
llevaron a la conformación de este colectivo integrado por trabajadores
culturales, artistas, gestores, docentes, estudiantes y vecinos en general.
El
comunicado, leído en la puerta del edificio municipal, denuncia el vaciamiento
de la cultura local y la vulneración del derecho a la misma. El abandono y la
falta de mantenimiento de los centros culturales de la ciudad, sumados a la
restricción del uso de los mismos, conforman el reclamo de los ciudadanos.
Otros puntos destacados son la suspensión de talleres municipales de formación
que se dictaban en distintos puntos de la ciudad, además de la falta de
ejecución de los fondos destinados al fomento de la cultura local.
La
desaparición de ciclos culturales como “cine bajo las estrellas” o “Jueves
Teatro Club”, entre otros. Cabe destacar que algunos de estos han sido
reestablecidos en las últimas semanas. La Asamblea expresa que todas las
actividades anunciadas después del 9 de enero, fecha de la primera reunión de
los vecinos autoconvocados, son una estrategia de “parche” desde el municipio
para “posicionar en la opinión pública que la secretaría de cultura opera
correctamente”, denuncia la Asamblea.
Falta de
promoción y difusión de los artistas locales, falta de estímulos e incentivos
para la formación y producción local, y la persecución policial a los artistas
callejeros se suman a la acusación de la agrupación que lucha por el Derecho a
la Cultura en Paraná.