Crónica y fotografías: Lara Margaritini
El pasado 2 de junio, Santa Fe volvió a recibirlos en la sala de un ATE Casa España súper íntimo y de público tan diverso que sorprendió; una franja etárea desde los 15 a los 70 años, es que el añoso grupo de rock-pop no dejó nunca de renovar su propuesta y con ella: lxs seguidorxs que se mantienen y lxs que llegan.
Las luces se apagaron y entró sin previo aviso una banda joven llamada Joystick que tuvo la oportunidad de participar en ‘Rock del País’, el programa de rock de Bebe Contepomi, donde grabaron su primer tema “Volviendo al principio”. Una propuesta de rock muy cercana al estilo de El Cuarteto de Nos y con claras influencias de Babasónicos que trasladó una energía vibrante y fresca, con tremendo power en el escenario.
Tras la sorpresiva banda soporte ingresó finalmente Babasónicos, a un sombrío escenario de humo y contraluz, escenografía en la que tocaron sus dos primeros temas antes de descubrir los rostros de los 7 miembros de ésta gira: Tuta Torres (Bajo), Adrián Dárgelos (Voz), Mariano Roger (Guitarra), Diego Tuñón (Teclado), Diego Castellano (Batería), Diego Rodríguez (Guitarra y voz), Carlos Hernán Carcacha “Carca” (Bajo y percusión).
‘Desenlace de tormentas eléctricas’ son tremendas reversiones de todos los hits del grupo, que se despega totalmente de la propuesta acústica de ‘Impuesto de Fe’, disco con el que giró la banda los últimos dos años.
Fotografía:Lara Margaritini
Fotografía:Lara Margaritini
El 2018 los conoció con un electroshow que no tiene desperdicio y que se da el lujo de mantener la armonía del rock que los vio nacer, con un Adrián Dárgelos más sensible y cercano a lxs fans, sumido en una impronta de padre consejero; presentó una banda que nunca dejó de reversionarse sin perder, sin dejar de ser cada uno: fusión y complemento, el claro resultado de este par de décadas de explosión constante.
A pesar de la propuesta intimista de la sala, nadie tardó demasiado en pararse a bailar, al tiempo de cada connotación de pasado estiramos las piernas para devolver a enormes músicos un poco del calor que nos brindaron.
Después del insistente aplauso del público luego de más de una hora de entrega total, se despidieron con una versión sublime de “El Colmo”, que dejó a todxs con una dulce ternura en el rostro y la vibra del amor por todo el cuerpo.
Gracias para siempre Babasónicos por toda tu sutileza.