Fotografías: Yoha Benitez
Este martes, los ocasionales peatones que circulaban por la intersección de San Martín y Urquiza se encontraron con guirnaldas con los colores simbólicos del orgullo gay. A su vez, carteles por doquier con la imagen de Pepa Gaitán en referencia a su lesbicidio, les recordaba a los transeúntes por qué el 7 de marzo se celebra el Día de la Visibilidad Lesbica. También, se podía ver la imagen de Higui y el pedido por su libertad. Una bandera estaba atada en cada extremo de los postes, con el reclamo por el Estado Laico. La música sonaba con un ritmo fiestero con letras contra- hegemónicas; cerca de los carteles ya mencionados, había collages con imágenes de parejas enamoradas.
Alrededor de las 18:30 se tomó el micrófono
para contar que hace siete años atrás, un 7 de marzo, Daniel Torres mató a Natalia “Pepa” Gaitán con un quemarropa por el hecho de no tolerar la
relación que tenía con su hijastra. Posteriormente se leyó el primer texto
“Fusilada por lesbiana”, que trataba sobre el asesinato de la ya
mencionada, el odio de su asesino hacia ella y el de una sociedad que lo
permite. Finalizó con el grito “¡Natalia Gaitán! ¡Presente, ahora y siempre!”.
Los manifestantes eran jóvenes, algunos habían sido autoconvocados y otros pertenecían a las diversas agrupaciones, entre ellas Sexualidades Disidentes, Juntas y a la izquierda, MPE y Mala Junta. La gran mayoría llevaba el pañuelo verde de Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
A pesar de que se presenciaron momentos de
reflexión sobre la visibilidad lésbica, crítico hacia un sistema que te dice
quien ser, que hacer, como sentir, la concurrencia fue poca. La mayoría de los
peatones evitaban pasar por donde se entregaban los volantes con la información
de Higui, mientras otros se animaban a sacarse fotos junto a los carteles.
Los medios locales se acercaron para
acompañar la jornada. Cerca de las 19 se leyó otro escrito que trataba sobre la
expulsión, la discriminación y la invisibilización que la
sociedad realiza. Minutos más tarde, se llamó a través del micrófono a quienes
querían participar del besazo. A metros de la catedral un grupo de mujeres
expresaban lo que es el amor en su máxima expresión.
Concluyendo con la intervención, se invitó a quienes habían participado del acontecimiento a sacarse una foto con la bandera del 8M.
Libertad para Higui
Un grupo de varones que frecuentaban violentar
y acosar a Higui, terminaron atacándola y violándola el 16 de octubre del año
pasado. En el intento de defenderse, ella mató a uno de sus diez agresores,y entre los
golpes quedó inconsciente. Posteriormente, un policía la despertó iluminándole la cara; junto a ella se encontraba el cadáver de su violador.
Hace más de 100 días que Higui se encuentra
presa, condenada por homicidio a pesar de que su acción fue en defensa
propia. Los nueve atacantes restantes todavía siguen libres.